Apuesta por la investigación y el desarrollo: ¿útil o fútil?

El Presidente del Gobierno Español quiere promulgar una apuesta más fuerte por la educación, la investigación y el desarrollo. A primera vista, la idea parece buena: en España, poca educación y poca inversión en la investigación, han dejado el país sin muchas opciones de avanzar una vez que el sector de la construcción se ha venido a bajo. Pero no todo podría ser tan fácil. El I+D+i (Investigación, Desarrollo e Innovación) es un campo en el que el sector privado también podría participar pero no lo hace. ¿Por qué? La respuesta es simple: el I+D+i es un idealismo de bajo valor añadido. Por un Euro invertido, se retorna poco dinero. Así pues, desde el punto de vista nacional, ¿qué beneficios puede reportar invertir en I+D+i? Podría no ser una opción factible para España si el objetivo es salir de la crisis pero quizá debería ser tomada en cuenta si queremos que la próxima crisis no golpee el país como lo ha hecho la actual.

 

En primer lugar, es importante ubicar a España en el mapa educacional. Considerando los datos de la OECD, la situación española no es muy alentadora. El siguiente mapa colorea el país en función del nivel medio de la nota obtenida en pruebas estándar por parte escolares:

España se encuentra a la cola de los países de la OECD. El gráfico que sigue, corrobora esta situación poniéndola al lado de otros aspectos importantes: en ordenadas, el ejercicio físico que llevan a cabo los niños de cada país. En abscisas, el gasto en educación. El color del punto determina la nota media (rojo equivale a baja nota, azul equivale a buena nota)

Es importante destacar la posición de España, Grecia, Italia y Portugal. Son los Estados Europeos en los que la juventud obtiene peores resultados educativos. Asimismo, con la excepción de Polonia y República Checa, son los Europeos que menos invierten en educación.

Es interesante analizar la situación de la inversión educativa en algunos países representativos de la OECD. Para el estudio que sigue, se han considerado por orden alfabético (en inglés): Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Japón, Portugal, España, Reino Unido y Estados Unidos.

Marcando una diferencia, es importante delimitar entre la educación primaria o segundaria y la educación terciaria. Ésta última abarca el campo de las licenciaturas, investigaciones asociadas y demás. Así pues, comprobemos, en el año 2006 cual fue el gasto educación primaria y segundaria, terciaria siempre por estudiante y la clasificación asociada. Para ello se han considerado los precios constantes del 2000.

Es notable comprobar la situación real. España invierte poco dinero. A nivel de los estudios de primaria y segundaria, un estudiante recibe 7.000 US$ desde el gobierno. A nivel de estudios terciarios, el gobierno español invierte 11.087 US$ por estudiante. Tan solo por encima de Italia y Portugal. A nivel total, el orden es el mismo, España encabeza la tercera posición por la cola y denota el interés que tiene en apostar por su juventud.

Asimismo, también es posible encontrar el dato de personas con estudios terciarios en estos países: ¿Como ha variado el número de personas que disponen de estudios terciarios desde el año 2000 hasta el 2006? Este indicador es a mi parecer de vital importancia puesto que muestra la tendencia hacia la preparación y la especialización. Esta preparación es indispensable para mejorar la situación de un país en casos como los que vivimos actualmente:

La comprobación es evidente. Suponiendo el número de personas con educación terciaria el año 2000 como el 100%, en el año 2006, España resulta ser el único país con menos personas con estudios terciarios. Teniendo en cuenta que la población de España creció (pasando de 40,2 millones de personas en 2000 a 44 millones de personas en 2006), este decrecimiento es sorprendente. Japón, país que ha mantenido constante su número de titulados terciarios ha visto como su población crecía menos en 1 millón de personas en el periodo 2000 – 2006 y aún así su número de titulados terciarios ha ascendido…

Para terminar este análisis, es interesante comprobar la posible relación con la crisis para intentar aportar un poco de luz a la problemática inicial. Para ello, se ha considerado la tasa de parados como un indicador de la situación y nivel de la crisis. ¿Existe una relación entre parados y inversión en I+D?

Como se puede comprobar, salvo los casos particulares del Reino Unido y de Portugal los países con menor tasa de paro son los estados que más invierten en I+D+i. Japón encabeza este ejemplo a la par que Finlandia y Estados Unidos. Dichos estados llevan la delantera en tecnología e investigación y todo ello tiene un motivo: una apuesta por el desarrollo.

Pero lo interesante va también más allá. ¿Como han superado la crisis los países que se han estudiado? Una vez más, comprobamos los beneficios de una apuesta por la investigación. Estados Unidos ha presentado una tasa de paro anual del 9,5% en 2010 y al parecer, la administración Obama está saliendo de la crisis. Asimismo, la tasa de paro de Japón tan solo ha alcanzado en 5,2% en 2010 y un 5,4% en 2009. Finlandia alcanzó un 8,5% de paro en 2010. Como se puede comprobar, son cifras de ensueño para países como Portugal, Grecia y especialmente España (cerca del 20% de paro en 2010).

Estos países no están superando la crisis con la facilidad con la que otros lo han hecho. Otro aspecto interesante relacionado con la inversión en I+D es el desempleo de larga duración. Según datos de la OECD, en 2008 Estados Unidos y Finlandia presentaban una tasa de desempleo de larga duración del 10,6% y 18,2% respectivamente: los dos valores más bajos de los estados estudiados…

Finalmente, es interesante destacar que en el año 2006, tan solo tres países en el mundo cumplían con el objetivo de Lisboa: el 3% del PIB invertido en I+D+i. Suecia, Finlandia y Japón son esos países.

 

Es tiempo de concluir al respecto de este tema. La educación, la investigación, el desarrollo y por ende, la innovación (estos temas van todos cogidos de la mano), son un pilar indispensable para un país. Como todo, un pilar no es cuestión de vida o muerte y por ello, Portugal, España, Grecia y semejantes no van a desaparecer tras esta crisis pero si que se denota una mentalidad.

Como se ha comprobado, la inversión en I+D+i y la cultura de la educación han permitido a diversos estados salir de una crisis en cuestión de 2 años y su sociedad ha sufrido leves consecuencias. Es el caso por ejemplo de Estados Unidos cuya tasa de paro alcanzó un pico en 2009 del 9,7%. Finlandia obtuvo un pico de 8,6% en el mismo año también. Por contra, España está en cifras espeluznantes: el 20% y estable. La crisis en este país es larga, duradera y dura sobre la sociedad obrera. Por otro lado, en Grecia el país ha estado al borde del “cataclismo” requiriendo la ayuda de diversas entidades internacionales.

Como a nivel empresarial, todo se trata de estrategia: Visión y misión. La visión de algunos países ha sido blindarse contra amenazas futuras, apostar por I+D aún sabiendo que ello no iba a reportar un beneficio inmediato. Por contra, otros estados han apostado por la velocidad sin control para un beneficio efervescente. España está entre ellos. La construcción se ha venido abajo y a la hora de mirar hacia otros horizontes, el país se encuentra lastrado por una falta de estudiantes con nivel terciario, poca cultura de Investigación y un sistema lamentable de apuesta por el futuro.

A veces, los beneficios no significan únicamente Euros o Dólares, los beneficios pueden significar también unos valores como seguridad, confianza y cultura. Esta crisis ha servido no solo para depurar el sistema financiero (que pronto volverá a corromperse), si no para demostrar que la mentalidad de muchos países, banqueros (también conocidos como usureros en el contexto Español), o empresarios dista mucho de satisfacer las necesidades del pueblo. España debe despertar de su sueño de la construcción (o pesadilla) y invertir en su propio futuro.

 

Fuente: Estadísticas EUROSTAT, Informes macroeconómicos de la OECD, elaboración propia de tablas.